Bulls narrowly fall to Cavs on the road, White scores 32

Todo esto comenzó en Music City hace cuatro, muchos, muchos meses, y los Bulls se han enfrentado a la música a lo largo del camino, un comienzo desastroso de 5-14 que culminó con un esfuerzo de peces muertos en Boston, rumores casi diarios sobre el intercambio del All-Star. Zach LaVine hasta que estuvo perdido durante la temporada luego de la cirugía, ausencias de semanas o meses para los habituales Patrick Williams y Torrey Craig.

Pero de la timidez surgió la tenacidad, de la retirada surgió la resiliencia. Múltiples rachas ganadoras de al menos tres juegos, la elegancia emergente de Coby White como un All-Star en espera, el misterio de sus propias torres de poder, la implacabilidad de Alex Caruso, victorias en Miami, Filadelfia y Milwaukee, y si no la certeza , entonces ciertamente algunas posibilidades con juego tras juego hasta los momentos menguantes, si no siempre ganadores.

Volvería a ser así el miércoles en Cleveland cuando los Bulls se acercaron y presionaron sus narices contra la ventana de la promesa, perdiendo 108-105 ante los Cavaliers en racha cuando el intento de White para empatar se fue largo al final.

Pero incluso si el próximo destino para muchos puede ser la playa, este no es un equipo de los Bulls listo para encontrarse varado o quemado.

“Los últimos dos meses han sido una locura para nosotros con las lesiones, lidiando con todo el ruido externo con los rumores de cambios”, admitió DeMar DeRozan, quien apoyó los 32 puntos de White, el máximo del juego, con sus propios 24. “Emocionalmente, Física y mentalmente, asumimos una tarea difícil durante los últimos 60 días y la superamos. Ahora podemos respirar un poco, reunir nuestras mentes y emociones y recuperar a Pat, con suerte, y recuperar algunos cuerpos y rejuvenecernos para los próximos (27) juegos.

“Pasar por todo lo que pasamos demostró que estamos ahí”, insistió DeRozan. “Fatigados, golpeados, regresando con mentes y cuerpos frescos, deberíamos poder sacar todo lo que necesitamos para salir corriendo. Ha sido un costo para todos nosotros, jugar con cuerpos limitados, sin saber quién iba a jugar, muchos muchachos acumulando muchos minutos. Refrescar la mente, sacar esas ganas y hambre de querer volver a la cancha. Cuando volvamos a salir, deberíamos estar listos para partir”.

Y así llegará ese sprint final que comenzará el 22 de febrero en casa contra los Boston Celtics, líderes del Este, actualmente los Bulls novenos en la conferencia con marca de 26-29. Pero convencidos de que lo mejor está por llegar.

“Estos momentos son buenos para nosotros”, dijo White, cuando finalmente le llegó el turno de ese potencial ganador/salvador del juego. “Siempre observo a Deebo (DeRozan) y una cosa que he aprendido de él es si el tiro entra o no, él está viviendo con ello. Me dio motivación después del partido para seguir adelante, aprender de ello, no poder pensar en ello. Pero voy a insistir en ello. Voy a intentar no pensar demasiado en ello, pero seguir adelante. Obviamente, tenemos que encontrar una manera de superar el obstáculo. Creo que encontraremos una manera de superar el obstáculo”.

Tienes la sensación de que este equipo Bulls cree. Puedes sentirte alentado por la forma en que se pierden en estos juegos hasta el final, incluso si el final no siempre sale como ellos quieren. Puede que ya no haya suficiente sin LaVine y la incertidumbre que rodea a Williams. Pero también han demostrado que no están tomando el camino fácil, ni se lo están facilitando a sus oponentes.

Así fue el miércoles con su último partido antes del receso del Juego de Estrellas.

Sin nadie en la plantilla que se dirigiera a Indianápolis para la bacanal invernal de la NBA, los Bulls parecían estar listos para un papel estelar en el partido televisado a nivel nacional por ESPN.

Los Bulls anotaron los primeros ocho puntos, la mitad de Andre Drummond comenzando con Nikola Vučević para contrarrestar el éxito de los Cavaliers contra los Bulls con sus gigantes al frente. Los Bulls ganaron el rebote con Drummond consiguiendo 10 puntos y 15 rebotes y frustraron a los Cavaliers en puntos de segunda oportunidad, donde anteriormente dominaban a los Bulls.

Caruso, que regresó nuevamente de un juego perdido, volvió al rol de banco y Ayo Dosunmu permaneció como titular con su reciente tiro caliente. Hizo cuatro triples más, todos tiros abiertos en la esquina derecha de drives y pases, a pesar de todos sus puntos. Pero Vučević anotó 4 de 16 para nueve puntos y ocho rebotes, ya que jugando con Drummond aparentemente se le negaron los espacios habituales en su zona de confort en la pintura.

Cuando después del partido se le preguntó una lista de cosas por hacer para el sprint final, el entrenador de los Bulls, Billy Donovan, respondió rápidamente: “Necesitamos tiempo con la alineación grande. Nos vimos obligados a hacer eso debido a algunas lesiones. Tenemos que limpiar eso un poco”.

Hay un atractivo considerable en ver el poder y la intimidación física de Drummond, pero la pareja obviamente sigue siendo una pregunta y preocupación para Donovan dado el lugar de Vučević, y los Bulls luego, con DeRozan jugando sus habituales minutos, convirtiéndose en un equipo mucho más lento y pobre en tiros de tres puntos. Como resultado, los Cavaliers pudieron dominar a los Bulls por dentro con 52-28 en puntos en la pintura. Los Bulls, que dependían más del tamaño, perdieron 15 pérdidas que los Cavs convirtieron en 22 puntos. Los Bulls tuvieron sólo nueve puntos en pérdidas de balón con menos jugadores persiguiendo agresivamente el perímetro y Drummond y Vučević consumiendo minutos. Aunque los Bulls hicieron dos triples más que Cleveland, los sorprendentes Cavs ahora tienen marca de 36-17.

“Realmente sentí el aspecto físico de este juego, Orlando, Minnesota, ha habido algunos juegos en los que hemos estado tarde que te dan una sensación de aspecto físico de los playoffs. Generalmente los equipos que están arriba en la clasificación tienen eso”, dijo Donovan. “Sentí que el físico de ellos nos obligó a cometer algunas pérdidas de balón. Pensé que nuestros manejadores de pelota se apresuraron un poco. La alineación grande probablemente nos ayudó en los tableros, pero podríamos haber hecho un mejor trabajo cuidando el balón”.

Esa sensación de playoffs produjo algunos empujones y técnicas compartidas en el tercer cuarto por parte de White y Georges Niang, y justo antes de eso, Donovan atacó al guardia de los Cavs, Max Strus, quien estaba hablando con Donovan mientras Donovan debatía con un árbitro. Donovan dijo entre risas que luego se disculpó con Strus, quien parece deleitarse molestando a los Bulls desde su liberación.

Strus no soltó mucho como en algunas victorias anteriores de los Cavs sobre los Bulls, ahora ocho consecutivas. Pero su enemigo habitual, Donovan Mitchell, incluso contra Caruso, fue demasiado rápido y poderoso con 30 puntos, siete asistencias, seis rebotes, una volcada destacada para dividir el doble y algunos elogios para su viejo amigo White.

Mitchell dijo que anteriormente tenían la misma representación y ha visto una diferencia con White.

“Ha estado anotando, ha estado mejorando a los que lo rodean, haciendo jugadas ganadoras”, dijo Mitchell. “Luego me hicieron pagar por no rotar al final del juego, 11 de 17 tiros de campo. Esas son tomas oportunas. Ha mejorado. Ver el crecimiento, la confianza. Puedes verlo en sus ojos. Parece que pertenece aquí, merece jugar así. Tengo el mayor respeto por su juego y por él. Él está ahí arriba en esa conversación (de Jugador Más Mejorado), sin duda”.

Hubiera sido aún mejor con la victoria televisada a nivel nacional, pero White prácticamente dominó la conversación de la segunda mitad con 23 puntos, cuatro de seis triples y los tres para empatar a 103 con 1:03 por jugarse.

Oh, solo por tres más.

White anotó un par de tiros libres faltando 7,7 segundos para acercar a los Bulls 106-105. Pero el último minuto de un último cuarto con 16 empates y cambios de liderazgo fue poco para que los Bulls celebraran.

Aunque no pareció buscarse durante gran parte del juego, llegaría a eso ya que los Bulls nunca perdieron la ventaja en los primeros tres cuartos.

Después del arrogante comienzo de Cleveland que llegó a 11-2 con un tres blanco, los Bulls se adelantaron por 11 y todavía 32-25 a uno. Caruso consiguió un par de robos en la mitad de la cancha y los Cavs estaban lidiando con la peor primera mitad ofensiva de la temporada, ya que los Bulls se adelantaron por 17 puntos, aunque estaban 49-43 en el medio tiempo. Pero eso fue con una primera mitad tranquila para las blancas.

“Fueron muy físicos con él; Realmente corrigió el rumbo en la mitad y salió y jugó un gran juego”, dijo Donovan. “Pensé que Coby tuvo una segunda mitad excepcional. Pensé que era genial, especialmente la forma en que lo jugaban a la defensiva”.

Cleveland se acercó a un punto varias veces en el tercer cuarto, y los Bulls llegaron al cuarto aún liderando 76-71.

Y luego llegó la NBA en su máxima expresión, White con un tres y luego un drive y Dosunmu completamente abierto para su triple de White. Pero White lo intentó de nuevo y Mitchell se anticipó y estaba en la línea para el robo y el contraataque para Strus. Estaban intercambiando tiros, golpes y triples, Darius Garland y White respondieron alrededor de ese minuto. Pero a Caruso le sancionaron una falta a un tiro de distancia de la pelota sobre Mitchell y Cleveland estaba 104-103 con 43,8 segundos restantes.

Los Cavs fallaron un triple y White se recuperó. Pero en lo que incluso White llamó la jugada definitoria, los Bulls no tenían la respuesta. La pelota dio vueltas y vueltas hacia White, quien conducía hacia la izquierda y pasó a Vučević que se lanzaba por el lado derecho del carril. El pase salió alto y fuera de los límites cuando faltaban 17 segundos en el tiempo reglamentario y los Bulls perdían por uno.

“Reduzca la velocidad y haga la lectura correcta”, se aconsejó White, siempre humilde y elegante y señalando con el dedo sólo hacia adentro. “Pensé que Vooch iba a saltar hacia los tres; hizo la jugada correcta al entrar. Si pongo el pase en el dinero, tendría una bandeja o uno de sus pequeños flotadores. Siento que tuve que frenar”. Bajar un poco más y hacer la lectura correcta. Creo que mis intenciones eran correctas al encontrar a Vooch; estaba abierto. Sólo tengo que hacer el pase. Siento que estaba demasiado frenético. Como dije, esos momentos definen el juego y “Sentí que ese momento definió el juego. Así que tengo que afrontarlo, digerirlo, aprender y ser mejor la próxima vez”.

Pero tendría otra oportunidad.

Y esta vez para él mismo.

Ha sido un elemento básico de los Bulls en las últimas tres temporadas que DeRozan fuera quien intentara atar firmemente al oponente con el último tiro. Incluso el líder ejecutivo del equipo, Arturas Karnisovas, señaló la semana pasada que DeRozan era el cerrador del equipo.

Aunque con el surgimiento de White esta temporada, ha habido una demanda de la comunidad por él.

Donovan aparentemente escuchó.

“Lo puse en la primera opción (intento de empatar el juego) a propósito”, dijo Donovan. “Para nuestro equipo, DeMar ha sido fantástico. Es un cerrador increíble. Pero habrá momentos en que lo harán doblete, lo atraparán, hay momentos en que le pondrán mucha longitud y tamaño, pueden negarlo y evitar que reciba el balón. Y no siempre será él quien salve el día. Tendremos que tener muchachos que den un paso al frente en diferentes momentos. Tengo mucha confianza y fe en Coby, y creo que él necesita estarlo en esos momentos”.

Con 11 segundos restantes, los Bulls cometieron una falta sobre Garland, quien anotó dos tiros libres para una ventaja de Cleveland de 106-103. Pero entonces los Bulls recibieron una llamada sobre Strus y White volvió a igualar a Garland, esta vez con tiros libres. Así que fueron los Cavs otra vez por uno y con el balón. Los Bulls cometieron falta y Donovan completó ambas.

Caruso le dio un saque a Vučević, quien colocó una pantalla alta, pero quizás demasiado alta ya que White la rodeó girando desde la línea de base izquierda y estaba bastante lejos arriba, casi 30 pies con un tiro que rebotó con fuerza en la parte posterior del aro. arriba y Cleveland estaba rockeando.

“Obviamente, estoy bastante enojado porque no acerté el tiro”, dijo White. “Momentos de aprendizaje; Tengo que seguir aprendiendo de ello. Mirando hacia atrás y reflexionando sobre este año y los pasados, que confíen en esos momentos es enorme para mí. Pero estoy enojado porque no acerté el tiro. Sentí que lo vi bastante bien. Aprenda de ello y la próxima vez que esté en ese momento, simplemente esté mentalmente preparado y preparado para ello. Esta es la primera vez en mi carrera que me han confiado en esos momentos. Para poder dar pasos en la dirección correcta y convertirme en el jugador que quiero ser en esta liga, necesito esos momentos; todo es parte del viaje”.

Uno en el que los Bulls insisten que está lejos de terminar.

“Al final del día, la W no está en el tablero, es una L”, reconoció Donovan. “Dentro de un mes nadie recordará lo que pasó: ‘Perdieron contra Cleveland’. Pero están peleando, compitiendo y batallando. Se alinearon y compitieron”.

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